Plan de Frutas y Hortalizas
En el marco de la “Organización Común del Mercado de las frutas y hortalizas”, se acordó en 2009 cofinanciar con los Estados Miembros interesados, un plan para promover el consumo de frutas y hortalizas.
La actuación se dirige a los centros escolares, para promover hábitos de alimentación saludables, favoreciendo la prevención de la obesidad y de las enfermedades asociadas, dado que es conocido por estudios poblacionales, que el consumo de frutas y hortalizas incide sobre el mantenimiento y mejora de la salud de las personas.
En el Reglamento (CE) nº 288/2009 de la Comisión, los Estados miembros que están dispuestos en aplicar un programa de consumo de fruta en las escuelas, acuerdan elaborar la estrategia que debe incluir los siguientes aspectos:
- Presupuesto del plan, especificando las contribuciones nacional y comunitaria.
- Duración.
- Grupo al que va destinado.
- Productos que pueden incluirse.
- Contribución de las partes implicadas.
- Medidas de acompañamiento necesarias para garantizar la eficacia del plan.
La Comisión establece que los Estados Miembros podrán elegir el nivel geográfico y administrativo apropiado en el que desean aplicar el Plan.
España consideró que el nivel administrativo apropiado para aplicar el Plan era el autonómico, dado la distribución competencial del Estado. Las competencias en materia agrícola, sanitaria y de educación, están transferidas a las Comunidades Autónomas y, en cada caso, recaen en organismos autonómicos diferentes.
Los tres ministerios implicados en este plan nacional son: el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (MSSSI) y el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (MECD).
En España el Plan comienza en el curso escolar 2009-2010, con financiación de la Unión Europea, del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA) y las Comunidades Autónomas (CCAA), y su desarrollo ha continuado hasta la actualidad.
Un punto de inflexión se produce en el curso escolar 2017-18, momento en el que el Plan cambia de dimensión y la Unión Europea propone un paso más, para alcanzar los objetivos. Ello ha propiciado un cambio de Estrategia para la aplicación del Programa Escolar de Frutas y Hortalizas, desde el curso escolar 2017-18 hasta el 2023. Dicha estrategia se ha diseñado a nivel nacional, pero continúa la actividad compartida con las CCAA.
La Comunidad Autónoma de Canarias se adhirió al Plan desde sus comienzos en el curso escolar 2009-2010, y desde entonces ha continuado su desarrollo hasta la actualidad. El plan está gestionado por el Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA), existiendo una coordinación entre las tres administraciones implicadas: el Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA), la Dirección General de Salud Pública (DGSP) y la Dirección de Ordenación, Innovación y Promoción Educativa (DGOIPE).
¿Qué es?
El Plan consiste en la distribución de frutas y hortalizas frescas durante el recreo escolar para su degustación, fuera de los horarios habituales de otras comidas.
En términos generales, el reparto de frutas y hortalizas se realiza durante un periodo de tiempo, entre 10 a 15 semanas, lo que permite que los escolares degusten repetidamente diferentes porciones de estos productos, de modo que se motive su palatabilidad y aceptación como hábito alimentario.
El Plan va dirigido al alumnado de edades comprendidas entre 3 a 18 años, pero se hará hincapié en la población de 6 a 10 años, puesto que se ha comprobado que es la fase en la que se instauran los hábitos alimentarios.
En Canarias el Plan se dirige a escolares de edades comprendidas entre los 3 y 12 años.
Junto al reparto de los productos hortofrutícolas, se tienen que realizar actividades didácticas que motiven el consumo de frutas y hortalizas. Estas actividades se conocen con el nombre de Medidas de Acompañamiento (MA), que son unas medidas preceptivas a realizar durante el desarrollo del Plan.
El MAPAMA ha elaborado una serie de herramientas didácticas para todos los participantes en el plan a nivel nacional. No obstante, en la CCAA de Canarias, siguiendo las indicaciones de la Comisión Europea, se ha elaborado desde el curso escolar 2015-16 unos materiales didácticos propios, con metodología bien definida, a fin de poder realizar un adecuado seguimiento y evaluación de todas las actividades.
Las Medidas de Acompañamiento (MA), tienen objetivos agrícolas y sanitarios. Por una parte, se incrementa el conocimiento de los aspectos de cultivo, temporalidad, procedencia y comercialización. Por otra, se trata de crear una clara conciencia sobre la importancia del consumo, aspectos dietéticos y nutritivos de los productos, además de resaltar la repercusión que la ingesta diaria de estos productos hortofrutícolas tiene sobre la salud.
Todas estas acciones formativas se desarrollan en la escuela de la mano de los docentes, que reciben previamente la formación necesaria para su aplicación en el aula, no solamente para que sirvan a los escolares, sino que también éstos actúen en su entorno como agentes de salud y los mensajes repercutan en el ámbito familiar y comunitario.